miércoles, 5 de octubre de 2011

Galo Mora entregará al CNE las cuentas del homenaje por el 30-S

Galo Mora, cultureta intrascendente, halló
mejor carrera haciendo propaganda
Galo Mora, anticipó que desde el seno de Alianza País no saldrán las cifras del costo de la concentración.

La organización de un acto de masas, similar al que Alianza País hizo el viernes para recordar el 30-S, requiere de un presupuesto que no baje del medio millón de dólares.

Ese es el valor que un partido y su militancia deben estar dispuestos a pagar para movilizar y alimentar a 150 000 personas, así como para alquilar el escenario que se usó el viernes en Quito.


Los rubros más importantes son los de transporte y alimentación. Solo desde las provincias de Guayas, Tungurahua, Azuay, Imbabura, Carchi y Santo Domingo se movilizaron 604 buses, con un valor de USD 251 200, según datos de los dirigentes de A. País.

Sin embargo, el Municipio habilitó 3 500 plazas de estacionamientos para buses que se coparon el viernes. De ahí que el cálculo de movilización hecho por este Diario aún resulta conservador.

Una vez ya instalada en la Tribuna de los Shyris, la militancia come al menos un refrigerio, ya sea por cuenta propia o del partido.

En el caso del viernes, dirigentes locales del movimiento del presidente Rafael Correa entregaban un sánduche y una gaseosa que, según dijeron, tenían un valor módico: 80 centavos.

Si se toma esa cifra como un valor referencial para las 150 000 personas, entonces en comida se gastó más de USD 120 000.

A estos rubros se debe sumar el costo de la tarima, de las pantallas gigantes tipo LED, del sonido, de la iluminación, de los artistas y de la elaboración de miles de banderas (ver tabulado adjunto).

¿Cuánto representa medio millón de dólares para las finanzas de una organización política y de su militancia?

Si se toma en cuenta la reciente campaña de la consulta popular del 7 de mayo, el presupuesto para esta concentración de un día equivale a casi ocho veces más el límite del gasto electoral, que fue fijado en USD 65 000.

En otras palabras, en la concentración de un día se gastó ocho veces más el monto que un partido tiene asignado para emplearlo durante 45 días, que incluyen cuñas publicitarias.

Sin embargo, en el presupuesto de medio millón de dólares no incluye los ‘spots’ publicitarios del acto que, según Participación Ciudadana, casi llegó a 1 millón (ver nota compartida).

Alianza País no da cifras

El movimiento oficialista guarda con celo las cuentas de la organización del acto del 30-S.

Su secretario ejecutivo, Galo Mora, anticipó que desde el seno de Alianza País no saldrán las cifras del costo de la concentración.

“No tienen por qué salir (las cifras desde Alianza País), rendiremos cuentas al Consejo Nacional Electoral en su debido momento”, señaló ayer el dirigente.

A criterio de Mora, el acto del viernes no fue político ni electoral, sino de recordación de un hecho “trágico” para la democracia. “Si no van a valorar la conmemoración, sino cuánto costó, me parece que hay un sesgo”.

No obstante, explicó que la infraestructura corrió por cuenta del movimiento. Mientras que el resto de recursos utilizados provinieron de donaciones de militantes canalizadas en provincias.

Casi USD 1 millón en publicidad

La concentración por el 30-S organizada por el Gobierno y Alianza País estuvo precedida por una intensa campaña en medios.

Según el Centro de Monitoreo de la Corporación Participación Ciudadana, casi USD 1 millón de dólares fueron empleados en tres campañas publicitarias relacionadas a la temática, sin firma de responsabilidad.

La primera y más costosa campaña es “30S: El día en que triunfó la democracia”, que fue difundida con 15 ‘spots’ en medios.

Según la organización Participación Ciudadana, la inversión en estos espacios publicitarios fue de USD 967 346. Estas cuñas fueron difundidas en la mayoría de canales de televisión y se concentró en los días de septiembre.

Junto a ella también aparecieron otras dos campañas de menor envergadura, según el reporte de Participación Ciudadana.

Se trata de un ‘spot’ alrededor del articulista Emilio Palacio y la agresión al reportero Gustavo Espinoza de EcuadorTV, con un valor de USD 2 400. Y la publicidad promocional del portal web alusivo al 30-S, con una inversión de USD 1 260. Estas dos últimas campañas solo fueron transmitidos en los medios que están en manos del Estado.

El informe de Participación Ciudadana agrega que durante septiembre también se programaron seis cadenas nacionales, con una duración global de 106 minutos. Todos esos espacios que solo pueden ser ordenados por el Presidente o sus ministros tenían que ver con el 30-S.

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