Juan Falconí Puig y Carlos Bravo |
En entrevista con CRE Satelital, Rosero, quien impugnó la candidatura de Falconí, señaló que este “no cumple con los requisitos mínimos para ser juez de la CNJ”, ya que “tiene intereses creados, juicios contra el Estado y afronta procesos por peculado de cuando era funcionario público”.
Según Rosero, “en todas las dignidades públicas en las que él ha estado, siempre han existido escándalos”, y es una persona que “tiene un largo historial de conductas personales y públicas, que han sido sometidas al escrutinio por las autoridades políticas y judiciales”.
“Lo conozco” y por esto “considero yo que es oportuno llegar al Consejo Judicatura y presentar las impugnaciones, que son más de 17, junto a la documentación pertinente”, manifestó.
Y es que Falconí “es un personaje polémico que ha dejado retractantes en todas las esferas en donde ha participado, que su reputación se eclipso ante la opinión pública como consecuencia de sus propios desaciertos, que tiene una larga trayectoria de conflictos y enemistades, y que es un hombre de pasiones desbordadas, es ampliamente conocido por su tendencia agresiva y poco reflexiva”, recalcó.
Las impugnaciones, que son recibidas por Recursos Humanos del Consejo de la Judicatura Transitorio (CJT), serán evaluadas por un comité de expertos, que calificarán la idoneidad de los concursantes que, en caso de ser impugnados, podrán defenderse.
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